Hace un par de semanas que no escribo nada por aquí, y la razón no es la tan consabida navidad, sino que el día 16 nos dieron un porracito por detras en el coche. Afortunadamente no pasó nada, el coche ni se inmutó (sólo avanzó un metro, ya que estabamos parados en un semáforo), pero a mí me diagnosticaron lo que ya es tán común en los accidentes de tráfico que es el «esguince vertical», con lo que me recomendaban no tocar el ordenador en unos días, y tener todo el reposo posible. Malas fechas para ello, la verdad.
Hoy vuelvo al tajo, aunque todavía no está el cuello como debería, pero temas tan apasionantes como el cierre contable me hacen abandonar mi retiro y volver al tajo, aunque me esté dando tirones el cuello (qué le vamos a hacer…). Afortunadamente, la semana próxima estoy de vacaciones, así que trataré de recuperar la mobilidad en lo que me une la cabeza con el tronco.
Pocusines saludos, y Feliz Navidad!!